(2015-07-30) Inglaterra: presentan un proyecto de ley para "limitar" la privatización

Presentación en la Cámara de los Comunes de un proyecto de ley que deje sin efecto la ley conservadora de sanidad y asistencia social y limite los intereses del sector privado    

Caroline Lucas, única diputada de Los Verdes en la Cámara de los Comunes, presentará un proyecto de ley destinado a suprimir gran parte de la Ley de Sanidad y Asistencia Sanitaria de 2012, devolviendo al Secretario de Estado de Sanidad la responsabilidad de la salud de los británicos, eliminando algunos elementos de subcontratación y permitiendo a la empresa privada únicamente prestar servicios esenciales para el bienestar del paciente y que el Servicio Nacional de Salud (NHS) no pueda facilitar.

El Proyecto de Ley para la Reinstauración del NHS cuenta con el respaldo de diputados de los partidos Laborista, Liberal-Demócrata y Nacional Escocés, si bien C. Lucas reclama el apoyo de la totalidad del Partido laborista, y concretamente de todos los actuales candidatos a su liderazgo, para dar un paso adelante en la campaña en defensa de una atención sanitaria verdaderamente pública.

Los laboristas ya se habían comprometido en su anterior programa electoral a derogar tan "insensata" Ley de Sanidad y a ello dedicaron tres años de campaña antes de perder las elecciones.

La diputada, que ya había introducido otro proyecto similar cuyo debate fue abandonado al disolverse el Parlamento antes de las elecciones generales, lo presenta a título personal: este tipo de legislación, que puede ser elevada por cualquier miembro de los Comunes o de la Cámara de los Lores a excepción de los ministros, tiene pocas probabilidades de adopción por ser escaso el tiempo parlamentario que se le dedica.

Por su parte, la Asociación Británica de Médicos, en su junta anual de junio, respaldó el proyecto de Reinstauración con el 53% de los votos, pero tanto los médicos como los médicos en formación optaron por que la Asociación no presionara al gobierno para su aprobación. En la reunión se afirmó que el nuevo proyecto devolvería al NHS su papel de servicio público responsable tras 25 años sometido a las fuerzas del mercado y lo liberaría de los costosos mecanismos de la privatización que malgastan el dinero del NHS y que podría utilizarse para atender a los pacientes. Al igual que Escocia y Gales, que ya han suspendido la privatización y vuelto al antiguo NHS sin grandes perturbaciones, Inglaterra podría hacerlo. Se defendió, sin embargo, que muchos de los objetivos del nuevo proyecto podrían lograrse sin necesidad de nueva legislación, evitándose así una ingente reorganización y coste en cuanto a tiempo, dinero y pérdida de moral del personal.
 
Ello, añadido a que se manifestó el desacuerdo con algunos aspectos del proyecto y sus pocas posibilidades de ser aprobado, dio lugar a un respaldo con escaso margen y al rechazo de involucrarse en ejercer presiones ante el gobierno al gobierno.
Extractado por Margarita Alonso para CAS
Noticias procedentes del diario The Guardian y de la British Medical AssociationH