(2017-05-29) Madrid: las listas de espera y el sufrimiento aumentan

De enero a abril de 2017, en solo tres meses se ha incrementado en 146.000 el número de madrileños/as a la espera de consulta externa o prueba diagnóstica con el especialista, hasta alcanzar las 391.668, para una población asignada de 6.473.663, es decir, una tasa de 61,31 por 1.000 habitantes.

De las cerca de 400.000 personas en espera de cita con el especialista, 102.929 esperan más de tres meses para ser atendidos, mientras que otras 106.861 esperan entre un mes y dos meses, 85.335 esperan de media entre 2 y tres meses, y 96.543 mantienen una espera de como mucho un mes.

Durante el mes pasado de marzo, 384.866 personas fueron atendidas por el especialista, pero durante el mes de abril la cifra descendió hasta los 299. 650, es decir, 85.000 personas menos, lo que no parece achacable exclusivamente a que la semana santa cayera en ese mes (en los festivos no hay intervenciones programadas, pero tampoco se indican pruebas o intervenciones).

Sin embargo estos datos no permiten realizar una valoración de la evolución histórica de la lista de espera, ya que hasta julio de 2016 nunca habían sido publicados los datos referentes a consulta externa y diagnóstica, mantenidos ocultos por las diferentes Administraciones que han gobernado en Madrid.

Respecto a la lista de espera quirúrgica, 80.294 personas estaban a la espera de intervención, cifra muy similar a la del mes anterior (80.841), pero superior en 1.000 personas a la de hace un año (abril de 2016: 79.175), lo que confirma que la situación está empeorando paulatinamente pese al “Plan integral de mejora de lista de espera 2016-2019”.

Si realizamos la comparación con el año 2005 (inicio del proceso de privatización de la sanidad madrileña), en 12 años hemos pasado de 35.000 personas en espera quirúrgica a 80.000, pese a la puesta en marcha (con dinero público) de 12 hospitales privados en la región.

Sin embargo, desde CAS advertimos que las listas de espera oficiales no son reales, dado que se utilizan diversos sistemas para retrasar la entrada de pacientes en ella, ya sea mediante el retraso en la indicación de la intervención quirúrgica, o la prueba diagnóstica, hasta la existencia de “pre listas de espera“ (pacientes con indicación por parte del médico, que debido a la saturación de la lista oficial son ”retenidos” hasta que la lista oficial va “dejando huecos”).

Mientras el sufrimiento de la gente aumenta y los sectores de clase media huyen hacia los seguros privados (el 33 % de los madrileños/as ya han suscrito un seguro privado de salud), continúa el deterioro del sistema sanitario. Así los centros de gestión directa siguen siendo infrautilizados en horarios de tarde y en muchas ocasiones no se cubren las bajas o ausencias de los profesionales, lo que sigue alimentando el crecimiento de las listas de espera para mayor gloria de el sector privado y de aquellos que trabajan en él, muchos de ellos combinando un trabajo por la mañana en el sector “público”.