Menos mal que nuestros inefables diputados de Podemos, aquellos que venían a hacer la nueva política milagrosa que iba a solucionar todo, y que han colaborado para que muchos hayan abandonado la lucha y sigan el circo mediático desde el sofá sin preocuparse de nada más, nos acaban de abrir los ojos: Hay derivaciones a la privada justificas e injustificadas, y dicen, “solo van a permitir las justificadas”.

No estaría de más conocer a que llaman ellos “derivaciones justificadas”, porque cualquiera que haya trabajado dos meses en el sistema sanitario sabe que lo que se deriva a la privada es lo sencillo y lo rentable económicamente. Lo costoso y complejo se queda en la “publica”.

No estaría de más conocer cuál es la postura de Podemos respecto del artículo 90 de la Ley General de Sanidad, aquel que fue diseñado para dar de comer a las empresas privadas por los padres de dicha Ley, ya que treinta años después de su aprobación, no es difícil concluir que dicho artículo, que establecía que los conciertos con los centros privados solo se podrían realizar después de “utilizar óptimamente los recursos sanitarios propios”, ha sido incumplido desde el mismo día de su entrada en vigor, y que sepamos, ningún gerente ha sido cesado por ello.

Por tanto, no hay ninguna derivación justificada a la privada porque la actividad se puede hacer en los centros financiados con el dinero de todos, que la Administración, en complicidad con la privada, mantiene (quirófanos, consultas y tecnología médica, etc.), sobre todo en los horarios de tarde, cerrados, infrautilizados y abandonados.
Veremos cuál será la próxima ocurrencia de los políticos, podría ser que hay privatizaciones buenas y malas, o que hay categorías de personal que está bien privatizado y otras no. Todo se andará. Al tiempo.

LA NOTICIA:

El diputado regional de Podemos José García Molina ha subrayado que "no nos gustan" las derivaciones de pacientes a la sanidad privada y ha advertido de que "sólo consentiremos las derivaciones que sean justificadas y estrictamente necesarias", y con los mismos criterios de "calidad y exigencia".

En su intervención en la comisión de economía y presupuestos de las Cortes, en la que ha comparecido el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, para explicar las cuentas de su departamento en 2016, García Molina ha señalado que las derivaciones a centros privados "son un mal necesario" pero también ha dejado claro que "hay que poner coto y control" a este sistema.

Ha recordado su compromiso de publicar cada trimestre las derivaciones de pacientes a la sanidad privada, que solo tienen que ser "justificadas y estrictamente necesarias", ha matizado.

El también secretario general de Podemos se ha referido, también, al convenio sanitario con la Comunidad de Madrid y no ha estado de acuerdo con las declaraciones, en la comisión, del consejero, que ha dicho que los pacientes de Guadalajara "está claro" que tienen que ser atendidos en hospitales de Madrid, por cuestiones geográficas.

Para Podemos, no obstante, los pacientes de Guadalajara deberían poder ser atendidos en Guadalajara, ya que algo diferente es la "cooperación" que hay en zonas fronterizas, como en el Hospital Virgen del Prado de Talavera de la Reina que atiende a los pacientes abulenses del Valle del Tiétar.

García Molina ha aludido a los recortes en sanidad durante la pasada legislatura, alrededor del 13 por ciento entre 2012 y 2014, pero también ha criticado que ya en la anterior legislatura hubo recortes con un gobierno socialista.

El líder regional de Podemos ha insistido en que los presupuestos de 2016 "no son los que quisiéramos" pero ha señalado que "hemos podido dejar una huella en algunas áreas".

En su última intervención, García Molina también ha dicho que el PSOE "parece que se viene arriba" en su apuesta por lo público cuando está en la oposición "y pide cosas que cuando está en el Gobierno es más difícil de cumplir".

En respuesta a Podemos, el diputado del PP Carlos Velázquez ha criticado que García Molina "se ha institucionalizado" porque a lo que llamaba "privatización" de la sanidad, ahora lo llama "derivación".

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